«Estamos poniendo fin a las salas de juntas sin mujeres en las grandes empresas», dijo Franziska Giffey, ministra de la Mujer y la Familia, quien describió la decisión como un «avance histórico».
Jutta Allmendinger, presidente del Centro de Ciencias Sociales WZB de Berlín, dijo que la decisión era «histórica».
Alemania va a la zaga de varias economías importantes en lo que respecta a la proporción de puestos ejecutivos superiores ocupados por mujeres. Según la Fundación Allbright sueco-alemana, una organización sin fines de lucro, las mujeres representan solo el 12,8% de los consejos de administración de las 30 empresas cotizadas más grandes de Alemania.
En comparación, se ha contratado a mujeres para el 28,6% de los puestos de liderazgo sénior en empresas líderes en Estados Unidos, el 24,9% en Suecia, el 24,5% en Gran Bretaña y el 22,2% en Francia.
Según Allmendinger, la decisión de introducir una cuota se produce tras décadas de cabildeo de mujeres en Alemania sobre cuestiones relacionadas con la igualdad de género en el lugar de trabajo. «Finalmente se rompió un largo estancamiento, cuando los principales conservadores comenzaron a apoyar la reforma, gracias a los esfuerzos incansables y la presión de muchas mujeres y redes», dijo a CNN Business.
En los últimos meses, las mujeres de las empresas, la sociedad civil, el mundo académico y las artes participaron en una campaña coordinada para impulsar la legislación, incluso a través de las redes sociales. y el hashtag #jetztreichts y #ichwill, que significan Suficiente es suficiente y yo quiero.
«A pesar de nuestro éxito, todavía tenemos mucho por hacer», dijo Allmendinger, señalando la necesidad de mejorar la diversidad de manera más amplia en los órganos de gobierno y abordar las desigualdades estructurales en el sistema tributario que, según ella, favorecen a los hombres que sostienen la familia. «El tema de género es solo una dimensión importante», agregó.
Alemania adoptó cuotas obligatorias para los consejos de supervisión en 2015, con el efecto de que las mujeres ahora representan el 36% de los puestos no ejecutivos del consejo en las grandes empresas, según el Instituto Europeo para la Igualdad de Género. Según el sistema de gobierno corporativo del país, los consejos de supervisión supervisan los consejos de administración, pero no toman decisiones que involucran las operaciones diarias.
Otros cinco países de la UE (Bélgica, Francia, Italia, Austria y Portugal) han adoptado cuotas de género obligatorias para los directorios de las grandes empresas que cotizan en bolsa.
Noruega fue el primer país del mundo en legislar cuotas de género para los directorios corporativos, requiriendo que las mujeres ocupen el 40% de los puestos en el directorio.
– Stephanie Halasz contribuyó reportandogramo.