La Roma de Jose Mourinho clasificó a la final de la Europa League tras un empate sin goles en Alemania ante el Bayer Leverkusen de Xabi Alonso. La victoria por la mínima en Italia (1-0) fue suficiente para que el equipo italiano consiguiera pasar a la final. La ‘Loba’, liderada por su arquero Rui Patricio, disputará su segunda final europea consecutiva después de ganar la Conference League el año pasado. El equipo italiano se enfrentará al Sevilla el 31 de mayo en Budapest. El conjunto andaluz eliminó a la Juventus en un partido disputado en el Sánchez Pizjuán.
El Sevilla, máximo ganador de la competición, sentenció la serie en la prórroga con un gol de cabeza del argentino Erik Lamela (95) tras igualar en Turín por el duelo de ida (1-1). La Juventus se había puesto a ganar con el tanto de Vlahovic al 55, pero el cuadro local empató al 71 con gol de Mama. Fue en los tiempos extras donde apareció Lamela para darle el boleto a la final a su escuadra. El Sevilla acabó sufriendo en los últimos minutos tras quedarse con 10 por la expulsión del otro argentino, Marcos ‘Huevo’ Acuña al 115.
José Mourinho, a sus 60 años, disputará el 31 de mayo su séptima final europea, más las tres finales de Supercopa de Europa perdidas. Aunque no tendrá el prestigio de sus títulos en la Champions con el Oporto en 2004 y el Inter de Milán en 2010 (más una final perdida con el Chelsea en 2008), en caso de ganar podría dar a su equipo un boleto para disputar la próxima Champions. La Roma, por su parte, tiene seis puntos menos que el cuarto puesto a tres fechas para el final del campeonato, lo que hace difícil clasificar a través de la Serie A.
El Sevilla, por su parte, jugará su séptima final de la competición. El equipo español ha disputado seis y las ha ganado todas, y ahora va por otro título para engrandecer su historia.
