El cierre de las operaciones de la minera la Corporación Minera Dominicana (CORMIDOM) por un conflicto con el sindicato de obreros ha generado preocupación en el ámbito empresarial y sindical debido al impacto económico que genera.
El Ministerio de Trabajo, como mediador en el conflicto, ha llamado a priorizar el diálogo ante cualquier mecanismo represivo.
Con las operaciones paralizadas por más de una semana, los efectos en términos económicos y laborales comienzan a generar inquietud en representantes empresariales y sindicales, que coinciden con el Ministerio de Trabajo en que la salida al impasse en CORMIDON debe venir desde el consenso.
La Asociación de Industrias estima en miles de millones las pérdidas que provocará este cierre, y preocupa que esto ponga en juego la inversión.
El Ministro de Trabajo, Luis Miguel Decamps, dijo que desde esa institución están dispuestos a agotar todos los recursos. CORMIDOM se encuentra inmersa en un conflicto con el sindicato de trabajadores que exigen un monto en bonificación que la empresa asegura no se corresponde con sus ganancias, reducidas producto del cese de operaciones por cinco meses tras un accidente con dos mineros que resultaron ilesos.
