La Unión Demócrata Cristiana (UDC) de la República Dominicana se encuentra envuelta en una polémica tras las denuncias del Secretario General, Leonardo Antonio Suero, sobre supuestas negociaciones secretas entre el presidente del partido, Luis Acosta Moreta, y el Gobierno dominicano y el Partido Revolucionario Moderno (PRM). Suero acusó a Acosta Moreta de haber entregado botellas de dinero de 40 y 50 mil pesos a algunos dirigentes del partido, y afirmó que estos acuerdos son realizados de forma unilateral, sin consultar al Comité Político de la UDC.
Según Suero, estas acciones de Acosta Moreta violan los estatutos internos de la UDC, así como las leyes de Partidos Agrupaciones y Movimientos Políticos, y la Ley de Régimen Electoral. Además, el Secretario General de la UDC recordó que en las elecciones de 2020, Acosta Moreta había lanzado críticas contra Luis Abinader, presidente del PRM, lo que hace aún más extraño su actual acercamiento al partido opositor.
Por tal razón, los dirigentes de la UDC, a través de un comunicado, han invitado a Acosta Moreta a dejar sin efecto cualquier tipo de negociación que busque alianzas con el PRM u otros partidos políticos. De no cumplir con esta petición, han advertido que acudirán ante la Junta Central Electoral y, si es necesario, ante el Tribunal Superior Electoral para garantizar los derechos de los miembros del partido.
La situación se agrava con la acusación de Suero de entregar dinero a algunos líderes del partido. Aunque Acosta Moreta no ha negado esta acusación, ha declarado a la prensa que el dinero entregado a líderes de la UDC formaba parte de un programa social llamado “Supérate” y que tenía como objetivo ayudar a los más necesitados. Sin embargo, algunos miembros del Comité Político de la UDC han declarado que no conocían la existencia de este programa ni la entrega de dinero a los líderes de la organización.
En general, la situación de la UDC refleja el clima político actual de la República Dominicana, marcado por una polarización creciente entre los partidos gobernantes y los partidos de la oposición. Además, muestra las tensiones internas de muchos partidos políticos, cuyos líderes luchan por el control y la influencia sobre las decisiones políticas que pueden tener un gran impacto en la vida de los ciudadanos.