Rusia y Belarús acordaron el despliegue de armas nucleares tácticas en el país vecino de Ucrania. Los ministros de Defensa de ambos países, Sergei Shoigu y Viktor Khrenin, firmaron documentos que definen el procedimiento para almacenar armas nucleares no estratégicas rusas en una instalación especializada en Belarús.
La parte bielorrusa recibió el sistema de misiles táctico-operativo Iskander-M, capaz de utilizar misiles no solo convencionales sino también nucleares. Además, parte de la aviación bielorrusa ha sido transformada para el posible uso de armas nucleares. La República de Belarús ha mostrado interés en desarrollar sus relaciones estratégicas con Rusia en la esfera militar.
Antecedentes: Belarús ha sido uno de los aliados más leales de Rusia desde que Moscú lanzó su invasión de Ucrania el año pasado. Aunque el presidente Alexander Lukashenko afirmó que su país “de ninguna manera” enviaría tropas a Ucrania a menos que fuera atacado, Belarús se ha mostrado dispuesto a proporcionar otros medios de apoyo.
Lukashenko planteó la posibilidad de que Rusia colocara armas nucleares estratégicas en Belarús durante un discurso nacional en marzo, al tiempo que acusaba sin fundamento a los países occidentales de “prepararse para invadir” Belarús y “destruirlo”. La líder de la oposición bielorrusa, Sviatlana Tsikhanouskaya, declaró que la decisión de Rusia de emplazar armas nucleares tácticas en su vecino “pretende subyugar a Belarús”.
