El Fenómeno El Niño ya ha comenzado según algunos expertos, pero se prevé que los efectos se sentirán a finales de 2023. La emisión de gases de efecto invernadero y el Fenómeno El Niño nos acercan cada vez más a cruzar una línea roja, fijada en el Acuerdo de París, que establece que la temperatura media mundial anual no debe superar en más de un grado y medio los niveles preindustriales. La Organización Meteorológica Mundial de las Naciones Unidas prevé un 66% de probabilidades de conseguir esa situación climatológica a nivel mundial en los próximos cinco años. Las consecuencias incluyen mayores temperaturas, olas de calor y riesgo de sequía, así como la eliminación de las estaciones y la desorientación de los seres vivos. Al menos uno de los próximos cinco años será el más cálido jamás registrado debido al incremento en las temperaturas del océano Pacífico que produce más evaporación, acumulación de vapor en la atmósfera y aumento de la temperatura media global.
El Ártico será la región más afectada, y se prevé que la anomalía de temperatura será tres veces mayor que la media mundial, provocando el deshielo de los glaciares. Peru es uno de los países más afectados, con un otoño excepcionalmente cálido. Las temperaturas registradas por el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología son cambiantes, con días nublados y otros con presencia de brillo solar. Teniendo en cuenta el Acuerdo de París, que establece el objetivo de limitar el aumento de las temperaturas por debajo de 2ºC en relación con los niveles preindustriales, la situación actual es de preocupación. De hecho, el secretario general de la OMM ha advertido que se prevé un episodio de El Niño en los próximos meses que, combinado con el cambio climático causado por los seres humanos, llevará a un aumento de las temperaturas mundiales sin precedentes con importantes repercusiones sobre la salud, la seguridad alimentaria, la gestión del agua y el medio ambiente.
Las autoridades están en alerta ante el inminente llegada de El Niño Global que podría ocasionar estragos y dejar damnificadas a miles de familias. Los efectos de El Niño son generalmente un aumento de las temperaturas, una mayor sequía en ciertas partes del mundo y fuertes lluvias en otras. Ocurrió por última vez en 2018-2019 y dio paso a un episodio particularmente largo de casi tres años de La Niña, que causa efectos opuestos y en particular un descenso de las temperaturas.